El Cuervo Blanco.

-No tengo tiempo para pelear contigo, prostituta.- vuelve su mirada hacia Bael, cristalizando su varita.-No voy a matarte, mi no estimado Bael, no es tu momento. Y a tu pregunta... ¿Qué soy? Soy una shinigami, por mi trabajo me dicen "la parca" ó "la muerte". Para quienes me conocen, su peor pesadilla.- Sonríe ante su auto-título.

-Mmm... ¿Eso significa que cuando te hablemos debemos decirte "hola señora parca" o "Blue peor pesadilla" o quizás "muerte parca Blue shinigami"? O ¿Tienes un apodo corto para los amigos? - Pregunto riendo un poco.

Bael decidió omitir una sonrisita estúpida que estuvo a punto de aparecer en su rostro ante sus bromas tan poco apropiadas para el momento. Se confundió un momento el por qué aquella chica sabría su nombre, pero al final recordó que los shinigamis pueden ver su nombre.

Bajó la varita y suspiró, decidió seguir su camino e ignorar a los dos demonios. No quería problemas.

-Escucha, payaso de circo barato, no tengo apodo "para los amigos" porque no necesito tenerlo. ¿Para que quiero jodidos amigos? para nada sirven.- dijo, dejando en claro que no tiene amigos, no los necesita.

-Aww ¿No somos amigos? Eso me parte el corazón pensé éramos los mejores amigos - Dice con lagrimas falsas haciendo casting para melodramas.

-No, no lo somos, maldito arlequín, solo somos "aliados" como dijiste, ni más, pero podríamos ser menos.

-Awww, ella cree que siempre quiero pelear con ella, pero tengo mejores cosas que hacer... ¡Burlarme de Bael!-Reí al final, sin molestarse para nada.- Xenos creo que no te quieren mucho-Decía entre unas pequeñas risas burlescas.

-Eso veo, sin duda no entiendo ¿Por que no? Soy muy querible... Apropósito Bael cuida manos de no aprovecharte de mas "accidentes" a causa de tu pobre vida sexual actual - Dijo como si nada sonriente igual que siempre.

-Eres bastante fácil de querer-Decía entre risas- Al menos para la gente con buen humor-Dijo mirando a Blue, marcando claramente que ella no lo tenía y era verdad, pero eso le servia para joder y joder.

-Tsk.-Solo se quejó, a fin de cuentas, ¿que importa el humor?- Solo si me cayeran bien, diría que somos... "amigos"- Hizo la seña de comillas con sus dedos, resaltando la palabra- Pero no, para ser como tales, debe haber confianza, y la confianza es difícil de ganarla... Y tan fácil de perderla- Susurró muy bajo eso último.

Bael ya llegó a casa al irse sin despedirse de aquellos sobrenaturales. Mari lo esperaba ahí con la cena fría, le preguntó por qué se había tardado tanto, y el mayor le relató su poco agradable encuentro.

---Entonces, ¿la emo que manoseaste en el restaurante es una Shinigami? Que ciudad tan extraña es esta, pareciera estar llena de sobrenaturales. Quizás mi profesor de Matemáticas sea un hombre lobo y yo ni lo sé.

-La cosa es querida... Que no hay que confiar, una cosa es llevarse mas o menos bien y otra es algo así.-Decía sin un toque de dolor, siendo que fue traicionada por muchos de sus hermanos ¿Pero que es la traición? El plato favorito de los demonios, a ella no le afectaba, al menos ya no.

-Depende si durante toda la clase no usa camisa seguro será de esos hombres lobos que adoran las adolescentes - Dice como si nada apareciendo de quien sabe donde - Espero no les importe me aparezca a cenar, ¿Qué cenaremos? - Dice tranquilamente sonriente XD.

Bael sintió un leve tic en el ojo y le susurró a Mari.

---Mari, recuérdame poner un hechizo anti-demonios alrededor de la casa. Si aparece ahora no quiero saber en qué otros momentos puede aparecer.

---¿Temes que te vea jugando con tus patitos de hule? ---respondió la castaña, con menos discreción que Bael. El mayor, simplemente sintió que su hija no era precisamente de ayuda.

-Pero ¿Por que poner un hechizo? ¿Acaso no soy querido en esta casa de patitos ancestrales? - Dice entre aguantando la risa.

Bael suspiró muy pesadamente. Por otra parte, Mari ya se sentía menos aterrada con la presencia de Xenos, pero aun parecía inquietarle mucho.

-Por cierto ¿Les incomoda mi compañía? Es que ando feliz como estuve en un set de películas y me encontré muy bonita utilería que parece muy real y que cambie por reales aunque dudo les importe al final mejor algo real que algo falso ¿No? - Dice de lo mas tranquilo... Aunque Bael fue el que pago por ese pequeño cambio.

---Debí adivinar que fue obra tuya... ---Bael no quería pelear con Xenos, ya que lo sentía una batalla perdida.

¿Eh? ¿Obra mía? ¿Qué fue obra mía? - Pregunta de lo mas inocente con una sonrisa que hace dudar que sea un demonio... A menos que lo conozcas.

Bael suspiró

---Olvídalo ---dijo simplemente sentándose en la mesa, quizás con un inesperado -e indeseado- invitado.

Desde la ventana, un ave blanca observaba, y después de unos cuantos segundos de estar posada ahí, levantó el vuelo y se perdió en la oscuridad.

Recorrió el cielo nocturno, llenando las calles silenciosamente tétricas y solitarias de su horrible cantar, el inconfundible graznido de un ave de mal agüero. Tardó minutos, quizás media hora volando, hasta que llegó a su destino. Se posó en su hombro, y parecía que susurraba cosas a su oído.

Seeré sonrió "están aquí..."

Se quedo un poco molestando a la Shinigami, con una sonrisa en sus labios. Aunque esos momentos de diversión se vieron interrumpidos, por un sonido que perturbo sus oídos, un sonido nada agradable. Parecía un ave lo que vio, completamente normal, pero no negaba que odio mucho que hiciera ese sonido tan molesto.

-¿Que te molesta más, que este aquí o el sonido de esa ave?-Le pregunto a la shinigami, sabiendo más o menos una respuesta, frunció el ceño nuevamente al escuchar el sonido, pero ahora se iba alejando más hasta el punto en que desapareció del área en la que se encontraba.

Sonrío un poco y susurró- Para ser sincera, eres una insignificante piedra en mi zapato- Dicho esto, desplegó sus alas, y se elevó en el aire, viendo el ave alejarse. ¿Será bueno seguirla o simplemente seguir con el trabajo?

Mientras estaba de lo mas feliz haciendo de una desgracia la vida de Bael suena su teléfono con la canción de tono "kakusei heroism".

-Hola... ¿Si?... Aja... Aja... Te desollare vivo y pondré tu piel como alfombra en mi sala de estar si vuelves a cometer un error así... Si también te quiero bye bye - Dijo todo de lo mas tranquilo hasta la amenaza a la vida de con quien hablaba como si fuera cosa de todos los días - Bael creo tendremos un problema de visitas familiares.

Mientras, en el hotel donde Xenos se hospeda, un chico de catorce años y cabello castaño estaba aseando los dos pisos. Le sorprendía lo descuidado que él tenía el lugar, ya que habían muchos papeles tirados por todos lados. Por consejo de Haro, estaba usando un delantal rosa. E inocentemente le hizo caso. Haro, en su mente, estaba riéndose al decirle que usara únicamente ese delantal.

---¿A qué rayos te refieres? ---dijo extrañado, tan impactado estaba que ignoró la amenaza que le dio a aquel pobre sujeto por teléfono. Mari, por el contrario, no pudo ignorarlo y exclamó "¡Bueno, yo lavaré los platos!". No era su actividad favorita, pero al menos así evitaría discretamente a Xenos.