Llegada a Mundo Origen

Sonríe con malicia analizándolo como si sus ojos atravesaran su alma.

-No eres de por aquí ¿Cierto? Pero la pregunta si no eres de por aquí entonces ¿De donde eres?

Su rostro no se veía con esa sonrisa de hace unos escasos minutos. Lucía serio, frío y con una gran amargura bajo esos ojos rojos.

---No lesss interessssa ---dijo antes de darse la vuelta. No tenía que perder tiempo con estos sujetos. Sólo debía encontrar algún lugar seguro para pasar la noche.

-Yo que pensaba que iba a ser divertido, ¿porque los hombres siempre se hacen los interesantes? Que idiotas.-Dijo, mientras apoyaba su arma en su hombro.-¿Hacemos algo Xenos?

Sonríe viendo a Maro/Haro alejarse ya teniéndole un ojo encima.

-Tengo la noche libre si quieres hacer algo - Dice encogiéndose de hombros sonriendo con malicia mientras por el rabillo del ojo ve por ultima vez  Maro/Haro decidido a investigar de donde vino por diversión como le pareció interesante.

Haro simplemente se fue del lugar, su mirada se notaba fastidiada. Lucía como la mirada que tiene uno de esos viejos de ochenta años que ya estan amargados y sacan constantemente a los niños de su jardín. Uno de sus tentáculos comenzó a sobresalir...

-Causemos destrozos, en todo caso si no quieres lo hago sola-Dijo, alejándose un poco a alguna zona con más gente a la que destruir.

Se encoge de hombros sabiendo no puede apresurar lo que sabrá de ese nuevo chico en la ciudad.

-Ya que suena interesante y no tengo nada que hacer - Dice yéndose con V.

-Ese idiota como me llama así...-Murmura molesta, sintiendo los pasos de Xenos detrás de ella.

Haro notó cierto ardor en las plantas de sus pies. No, no tenía mucho tiempo. Debía encontrar un lugar rápido, sus heridas de los pies estaban por reabrirse, el efecto de su débil hechizo no duraría más de cinco minutos.

-Sabes recordé que necesito hacer algo, nos vemos - Dice despidiéndose en un ademan dirigiéndose hacia donde Maro/Haro.

-Como quieras-Dijo, se puso en posición de ataque y mato a unos jóvenes que estaban drogados, una cruel matanza para poder tener dulces sueños.

Se fue en la dirección de Maro/Haro y lo siguió hasta llegar con el.

-Cielos que mal muy mal parece estas muy herido pobre - Dice con ligera risilla apareciendo junto a el.

---¿Qué mierda quieresss, imbécil? ---Preguntó con hostilidad, en especial porque al estar herido era vulnerable y no quería demostrarlo.

Vamos vamos calmado, solo quiero ayudarte se ve necesitas curarte y un hogar ¿me equivoco? - Dice sonriendo como si supiera como controlarlo con solo verlo.

---No te importa, déjame ssssólo.

Simplemente que puedo ofrecerte eso, pero nada en este mundo es gratis y el pago que pido es información - Sonriendo como si lo tuviera en la palma de su mano.

Haro analizó la situación, suspiró reasignado y siseó:


---Essstá bien.

Sonríe al ver gano y los hace desaparecer a el y a Maro/Haro en un portal.

-Vamos a casa para hablar tranquilamente - Dice con una sonrisa de malicia llevándolo a su hogar.